Como sabrán amigos (y si no lo saben se los cuento) soy hijo de un Dios . El Excelentísimo Señor Hades se conoció con mi madre, y mi existencia surge de esa unión. Pensarán ustedes que ser un “semi-dios” podría ser bueno, que contaría con beneficios y poderes : nunca estarán tan alejados de la realidad, ¡por todos los cielos! Gracias a una investigación realizada por el director de Maisonier, me di cuenta de que tengo a varios Dioses en contra mío, sobre todo a la mujer de Hades. Perséfone debe estar celosa de las andanzas de mi padre, y seguramente hará todo lo posible para que la pasemos para el orto los descendientes humanos del dueño del Inframundo. Cualquier similitud con Zeus y Hera es pura coincidencia, así que la teoría de que las mujeres y las diosas son iguales la plantearemos más adelante. Es muy común ver a Zeus en lugares como Esperanto o Tú y Yo.